La Alumbrera

Mina “La Alumbrera”

     Minera Alumbrera es una sociedad conformada por el Estado Argentino y empresas públicas para desarrollar actividades mineras en el Bajo de La Alumbrera, al este de la provincia de Catamarca. Posee un alto nivel de la productividad del trabajo y de competitividad en relación con el nivel medio de la economía nacional al que superan varias veces. Cada año, esta industria presenta cifras impresionantes, nuevos récords en materia de inversiones, producción y exportación. Esta vía de impacto económico comprende los efectos directos e indirectos de las decisiones de compra de insumos y materias primas en los mercados de bienes intermedios y de factores de producción, principalmente en el mercado local de trabajo.

     Algunas decisiones tomadas por la empresa pueden implicar incrementos o disminuciones en el bienestar de otros agentes económicos de su área de influencia sin que exista transacción económica alguna, acciones o sus consecuencias se denominan externalidades y, son fallas de mercado que provocan un nivel de producción subóptimo del bien económico.

     Sin embargo, de todas las ganancias que se generan, el pueblo argentino no recibe nada; es más, sufre un impacto negativo de todos los daños ambientales, sociales y económicos que genera a gran escala. Son las transnacionales extranjeras las que se enriquecen gracias a nuestros recursos y las violaciones de los derechos.

     Aunque las empresas mineras son las principales en este desastre, es el Estado Argentino el que permite que siga sucediendo mediante una legislación permisiva que estableció varios beneficios para estas empresas, más que todo exenciones fiscales.

     Las poblaciones locales ven su derecho a la salud afectado debido a la alta contaminación, y además sus actividades económicas se ven comprometidas. También, estas empresas no reconocen el derecho a la tierra de los pueblos originarios, violan sus derechos culturales y aniquilan la libertad de expresión comprando el silencio de los pobladores.

     Se le debe exigir al Estado y a los gobiernos provinciales que hagan respetar los derechos de los pueblos afectados por la gran minería, y que cambien las leyes para que el país no regale sus recursos a empresas extranjeras.

     En resumen, se puede decir que Argentina se transformó en uno de los países más codiciados por las grandes transnacionales mineras sobre todo por una legislación permisiva. Lo que hace falta es la creación de un marco regulatorio para controlar la actividad de las empresas extranjeras que ingresan al país.

     Esta falta deja como resultado violaciones a los derechos humanos. Con el apoyo de los políticos y de los medios, las empresas mineras actúan en total impunidad, aprovechando la vulnerabilidad de las poblaciones locales.

     La gran minería desplaza las actividades económicas desplaza las actividades económicas locales, afectando la cultura y al identidad de las comunidades para las cuales la tierra es el centro de su vida.